Senado: Patricia Bullrich obtuvo su dictamen, pero la reforma laboral recién se discutirá en el recinto en febrero

Una negociación de último momento de la jefa del bloque libertarios del Senado, Patricia Bullrich, en la Casa Rosada salvó al Gobierno de que la reforma laboral fracasara en el Senado incluso antes de llegar al recinto.

Ahora, la iniciativa obtuvo dictamen en las comisiones de Trabajo y de Presupuesto y Hacienda, pero recién se tratará en el recinto en febrero. Así lo anunció la propia Bullrich ante el plenario de comisiones una vez que se agotó la lista de invitados que, entre ayer y hoy, expusieron sus puntos de vista sobre el proyecto impulsado por el gobierno de Javier Milei.

La nueva hoja de ruta del oficialismo en el Senado contempla la postergación para el 10 de febrero del debate en sesión de la reforma laboral. En el ínterin hasta esa fecha, según confió Bullrich, se seguirán aceptando propuestas de modificaciones al proyecto para tratar de conseguir el mayor respaldo posible.

En este contexto, el contenido del dictamen pasó a un segundo plano. Aunque el texto que obtuvo luz verde en las comisiones tiene algunas modificaciones con relación al que envió el Gobierno hace una semana, se espera que se sumen mucho más de acá a febrero.

Lo que obligó a postergar todo fue la polémica sesión de la Cámara de Diputados en la que se aprobó el presupuesto 2026 y el oficialismo selló una alianza con el kirchnerismo para nombrar tres miembros de la Auditoria General de la Nación (AGN).

“Se había perdido la confianza”, confió a LA NACION un legislador al tanto de las frenéticas negociaciones que se dispararon tras la madrugada vivida en la Cámara baja. “Los Menem detonaron todo”, le dijo a este diario una funcionaria de la Cámara alta, en referencia a los primos Martín, presidente de la Cámara de Diputados, y Eduardo “Lule” Menem, segundo de Karina Milei en la Secretaría General de la Presidencia.

Sin embargo, la bomba que terminó por derrumbar todo fueron las declaraciones filtradas desde Casa Rosada de que el Gobierno no estaba de acuerdo con el presupuesto que esta madrugada aprobó la Cámara de Diputados y que pensaba vetarlo si es que el Senado lo convertía en ley.

“¿Para que vamos a aprobar el presupuesto si lo van a vetar? Lo mejor es sancionar el presupuesto y esperar a que lo promulguen; después avanzamos con la reforma laboral. Si lo vetan, no tratamos nada", le dijo a este diario un senador radical, que todavía no salía de su enojo por las amenazas que llegaban del Poder Ejecutivo.

La Cámara baja aprobó el presupuesto 2026 pero sin el capítulo 11, en el que el oficialismo había incluido la derogación de las leyes de financiamiento universitario y de emergencia en discapacidad, sancionadas por el Congreso, vetadas por el Poder Ejecutivo y ratificadas por el Parlamento en lo que fue una dura pulseada legislativa perdida por el gobierno de Javier Milei.

El acuerdo que terminó por evitar una nueva ruptura de relaciones entre el Gobierno y el Senado se alcanzó poco después de las 15, en la sede el bloque radical con la participación de representantes de casi todos bloques de la oposición. La única excepción fue el kirchnerismo.

En ese encuentro se terminaron de cauterizar las heridas políticas de la oposición dialoguista y se definió la postergación del debate de la reforma laboral hasta febrero, y avanzar con el presupuesto 2026.

Para muchos fue un alivio. Bullrich obtenía el dictamen y evitaba el fracaso de la reforma laboral, que terminó negociando en Casa Rosada cuando el escándalo de la sesión de Presupuesto en Diputados puso al proyecto al borde del abismo legislativo.

La oposición dialoguista, en tanto, evitó la escena de quedar aprobando una iniciativa compleja y con propuestas de cambios de todos los sectores involucrados en un trámite exprés, con apenas días y medio de debate en comisión y su discusión en el recinto una semana después.

El contenido del dictamen se conoció minutos antes de las 18. En ese momento, Bullrich iniciaba una encendida defensa de la modernización laboral impulsada por su Gobierno. “Tenemos dictamen de mayoría”, cerró su intervención antes de celebrar su primer éxito legislativo con una foto acompañada del jujeño Ezequiel Atauche, presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, y otros senadores oficialistas.

Decidida a cumplir la meta que se fijó, Bullrich condujo esta mañana la segunda jornada de debate del plenario de las comisiones de Trabajo y de Presupuesto y Hacienda en la que expusieron representantes de diferentes entidades sectoriales y profesionales sobre varios aspectos de la extensa iniciativa de casi 200 artículos.

Una vez agotada la lista de oradores, la senadora libertaria no se anduvo con rodeos y anunció que la reunión pasaba a cuarto intermedio hasta las 16, para escuchar a los últimos invitados, y “a las 17 reunirnos para debatir y firmar dictamen”.

El debate había comenzado ayer con una extensa jornada de más de 10 horas en la que desfilaron referentes y representantes de cámaras empresariales y patronales, y diferentes centrales sindicales, como la CTA y la CGT.

Durante las exposiciones se escucharon cuestionamientos al proyecto, en su mayoría centrados en el retroceso que implicaría para los derechos laborales de los trabajadores y la eliminación de la ultraactividad de los convenios.

También se plantearon quejas por la derogación de varios regímenes especiales, sancionadas por ley, como el estatuto del periodista, de los viajantes de comercio y de los peluqueros.